domingo, 28 de noviembre de 2010

Arbóles de navidad con un poco de historia!!



Un árbol de largas ramas, brinda la posibilidad de colocar muchos adornos. Este abeto fue decorado en una determinada gama de colores: plateado, dorado y blanco. El resultado es un árbol de Navidad muy elegante.



En las tradiciones ucranianas y alemanas, hay una historia de Navidad que explica el origen de las guirnaldas o espumillón. Cuenta la historia que un pobre viuda no podía comprar regalos para sus hijos ni para la decoración de su árbol. Una Nochebuena, decoró el árbol lo mejor que pudo con diferentes frutos. Después que se fue a dormir, algunas arañas salieron y dejaron sus telas en el árbol. Cuando Papá Noel visitó la casa, vio el árbol cubierto de telas de araña y decidió convertirlas en plata. A la mañana, cuando la familia se despertó, el árbol era espumoso y hermoso. Este árbol que vemos aquí tiene una inspiración alemana, con bolas de Navidad inspiración cristal y perlas, mariposas de vidrio y una tela de araña color plata.




En Polonia, donde la temporada de Navidad es vista como un momento de renovación, son comunes los adornos estilo paja para simbolizar las gracias por la cosecha y la esperanza de cosas buenas para los próximos años. Los huevos representan la promesa de la prosperidad futura.



Según la leyenda de las rosas de Navidad, una pobre pastora llamada Madelon atendía a sus ovejas en una colina cerca de Belén una noche de nieve, cuando vio a los Reyes Magos llevando regalos al niño Jesús. Madelon lloró, sabiendo que no podría regalarle nada al nuevo rey. Justo entonces apareció un ángel y convirtió sus lágrimas en rosas. Madelon recogió las rosas y se las llevó a Jesús. A raíz de esta leyenda, las rosas de Navidad pueden utilizarse para decorar el árbol como recordatorio de esta historia.



A pesar de que los japoneses no tienen tradición navideña, algunas personas han aprendido una lección de paz y buena voluntad de Sadako, una niña que desarrolló leucemia después de los bombardeos de Hiroshima en 1945. Ella se enteró de una leyenda japonesa que dice que si uno elabora 1000 grullas en origami, los dioses podrían concederle un deseo. Sadako nunca pudo llegar a su objetivo. Después de su muerte, sus compañeros de clase plegaron papel hasta compensar lo que a Sadako le faltó hacer. Desde entonces, muchas personas de todo el mundo ha enviado grullas origami a Hiroshima. Y a raíz de esta historia, algunos arbolitos de Navidad se decoran con grullas origami y otras figuras en papel plegado.




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